El acoso escolar, tanto en su forma directa o presencial (bullying), como a través de los dispositivos digitales (cyberbullying), implica el uso deliberado y repetido del poder social de uno/s respecto a otro/s con la intención de causar daño. Es esta intencionalidad, al atentar contra el bienestar de otro la que tiene más efectos en la convivencia, lo que le da transcendencia a la detección, intervención y eliminación del fenómeno. Este comportamiento tiene una dimensión moral que venimos poniendo en evidencia mediante el trabajo científico, y que, sin embargo, no está suficientemente atendida en los planes educativos y en las prácticas diarias. El simposio representa una apuesta por una perspectiva teórica y metodológica innovadora, que trata de poner en evidencia los mecanismos socio-morales que pueden influir en que un individuo agreda injustamente a otro, mientras otros permanecen impasibles ante la humillación de un compañero o compañera. Se presentan cuatro investigaciones que analizan el papel de la motivación, la emoción, el coraje y la desconexión moral impactan en comportamientos de agresión y defensa entre iguales. Se discuten los resultados en términos de la relevancia de prestar atención a las complejas dinámicas interactivas que surgen en los fenómenos de acoso y ciberacoso y se subraya la relevancia de las investigaciones presentadas para el diseño de programas preventivos que se ajusten a los avances en la comprensión de las claves psicosociales y grupales de las relaciones entre los escolares.